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Si lleva un tiempo jugando en un casino online, sabrá que hay varias jurisdicciones que conceden licencias. Proporcionan a los operadores licencias de juego, lo que les da derecho a ofrecer sus servicios de juego de forma legal. Hay algunos actores fuertes, pero la Comisión del Juego del Reino Unido es probablemente la más reputada y conocida de todas.
El Reino Unido siempre ha contado con organismos de gobierno para controlar el juego. Sin embargo, la UKGC (Comisión del Juego del Reino Unido) no se puso en marcha hasta 2014. Antes de eso, la jurisdicción de la organización se limitaba al mundo de las apuestas terrestres. A raíz de los cambios legislativos de ese año, la UKGC asumió el control general de las normas profesionales del sector de las apuestas en línea en Gran Bretaña.
La Comisión del Juego del Reino Unido es uno de los reguladores más estrictos que existen. Cada casino debe esforzarse por obtener una licencia de la UKGC, que naturalmente concede al operador el derecho a prestar sus servicios a los jugadores del país. Cualquier casino que no se adhiera estrictamente a las regulaciones establecidas por la UKGC podría terminar con la revocación de su licencia.
La autoridad de juegos de azar del Reino Unido es un hueso duro de roer y los operadores que prueban suerte no han tenido ningún éxito en eludir sus requisitos. Algunos de los objetivos de la UKGC son los siguientes
Como puede ver, la Comisión del Juego del Reino Unido es una de las autoridades más estrictas a la hora de conceder licencias. Cualquier casino que no cumpla con los requisitos no podrá obtener una licencia, y cualquier casino que no tenga una licencia de la UKGC tiene prohibido ofrecer sus servicios a los jugadores del Reino Unido.
Teniendo en cuenta la cantidad de obstáculos que la Comisión del Juego del Reino Unido hace pasar a los casinos para obtener dicha licencia, así como los constantes controles y cambios de regulación que un operador debe hacer para mantenerse al día con las normas de la UKGC; cualquier casino en línea que cuente con dicho permiso puede clasificarse fácilmente como uno de los casinos más seguros y legales de la red.
La UKGC también establece un marco no específico para la interpretación de sus licenciatarios. Las marcas con licencia de la UKGC promoverán sus propios consejos y normas para el juego responsable tomados del LCCP (Licence Conditions and Code of Practice). En resumen, se trata de un conjunto de normas que los casinos y las casas de apuestas utilizarán como modelo para operar de forma socialmente responsable.
Cuando las empresas interpretan las normas, ciertamente se convierte en una especie de autorregulación. Y aunque esto suele ser una receta para la inacción, tiene resultados tangibles. Por ejemplo, sin ninguna orientación, las empresas de juegos de azar acuerdan reducir significativamente el número de anuncios de apuestas y juegos mostrados durante los eventos deportivos en vivo en 2018. De hecho, esperaban que la UKGC acabaría haciéndolo, así que decidieron adelantarse al regulador.